17/5/12

La mujer, acusada por la muerte de su hijo Librada: “fue un accidente”

Madre de 3 niños, su vida, una tragedia
Mujeres madres detrás de las rejas
CITLALLI LÓPEZ
9 de Mayo de 2012
Noticias, Voz e Imagen de Oaxaca
Librada Cruz, se truena los dedos, sus ojos dejan escurrir las primeras lágrimas. Ella todavía no rebasa los 25 años de edad y su vida se transformó en una tragedia. Lleva dos meses detenida en la penitenciaría central de Oaxaca, en Ixcotel, acusada por el homicidio de su hija a quien parió en el baño de un hospital público.
Librada es originaria de San Pedro Pochutla. Ella sólo terminó sus estudios básicos para convertirse en ama de casa y parir consecutivamente tres hijos, quienes hoy tienen 5, 4 y 1 año 8 meses.
Su vida se apagó la noche del 26 de enero. Librada había pasado los últimos dos meses al pie de una cama de hospital, primero en Pochutla y luego en el Hospital de la Niñez en Oaxaca, en donde permanecía internado su primer hijo debido a un soplo en el corazón y leucemia.
Librada supo el diagnóstico unos días antes de ser ingresada al penal de Santa María Ixcotel acusada por el homicidio de su recién nacida, a quien parió en el baño público del nosocomio.
Así lo recuerda:
“Eran como eso de las nueve o diez de la noche. A esa hora andaba yo con mi hijo paseando porque todo el tiempo, todo el día tenía fiebre, no se le quitaba, no comía bien, ya había quedado bien delgado. A veces me desesperaba yo porque estuve no sé cuánto tiempo en el hospital de Pochutla y luego me vine para acá y ni ellos sabían que tenía (…)”.
Librada, quien tiene 24 años pero lleva sobre ella la vida de una mujer de mayor edad, cierra los ojos henchidos de lágrimas, respira y sigue desgranando:
“Me dio ganas de ir al baño, como a cualquier persona, me fui y fue en donde me ocurrió ese accidente. Ahí se me vino una hemorragia y luego ya no supe nada, me desmayé, cuando me di cuenta estaba en el Hospital Civil. Ahí ya me estaban custodiando, me dijeron que estaba yo detenida porque intenté matar”
La mujer llegó al penal el 30 de enero. Parca en su hablar detalla; “supuestamente dicen que yo maté a mi hija que estaba esperando, dicen que yo le puse un cubre boca, que le puse un trapo, que la maté no sé como, pero no fue así, nunca fue así, pero no sé exactamente como fueron las cosas”.
Tenía cinco meses de embarazo, la gestación transcurría con normalidad, ¡fue un accidente!, afirma insistentemente.
“Mi hija se cayó en la taza del baño, pero dicen ellos que yo la quise matar pero no fue así”, reitera con desesperación.
Durante esos dos meses previo al encierro, Librada medio comía, medio dormía, paseaba como una zombi en el hospital llevando en brazos a su hijo hirviendo en temperatura.
Sentada en el ahuecado sillón del cuarto del separo, el rostro de Librada se desencaja, sus ojos se hinchan aguantando las lágrimas, tratando de ser fuerte ante el recuerdo.
“Debía cuidar a mi hijo porque ¿quién lo cuidaba?; yo tenía que hacer todo eso, debía llevarlo al baño porque tenía mal la rodilla. Lo cargaba, lo paseaba porque todo el tiempo tenía calentura, la fiebre era de 40. Todo eso tenía que hacer, no podía dejarlo solo, él no se quedaba, estaba yo sola. Mis cuñadas me iban a ver, pero a veces iban a la comida, al almuerzo, tenía menos de 15 minutos para comer y poder entrar”.
La última vez Librada vio a Oliver, su hijo de 5 años, fue el 26 de enero, esa noche, antes de que todo ocurriera, su pequeño le pidió que no lo abandona.
”Fuimos a ver la tele, lo estaba abrazando porque en ese momento tenía temperatura. Me dijo que me quería mucho y que yo lo abrazara, que nunca lo dejara. Yo le conteste, nunca te voy a dejar, juntos llegamos y juntos vamos a salir. Ahí fue en donde yo lo dejé”, Librada no pudo cumplirle.
¿Tu esposo, en dónde estaba?
Mi esposo ya no estaba conmigo, ya se había ido, yo tenía que cuidar a mis hijos, mi suegra me ayudaba a cuidarlos. Él me ayudaba con la manutención y todo. Sabía que yo estaba embarazada, pero como dice la gente, el cuidado (de los hijos) le corresponde a la mamá, no al papá. Yo soy la que más empeño le ponía a mis hijos, no le pedía a él, yo siempre los cuidaba, los llevaba a la escuela, yo los recogía, trabajos que a ellos les pedía yo lo hacía. Casi no tenía la ayuda de él.
¿Cómo ha sido tu vida dentro del penal?
Es difícil, no se compara con estar fuera.
¿Qué sientes estar separada de tus hijos?
Me siento triste porque yo estaba acostumbrada con ellos, todo el día estaba yo con ellos. Pues la verdad se siente uno bien triste, en mi lugar no los he visto, desde que yo caí aquí no los he visto. A nadie le deseo que esté aquí. Hay personas que no saben apreciar la vida, se meten en problemas, vuelven a caer de nuevo. No les importa y no valoran su libertad. Esto no es justo porque hay personas culpables y los dejan salir, otros son inocentes y aquí los tienen.
¿Pensaste en no tener a tu hija?
No, yo nunca hice nada, desde que supe que estaba embarazada no hice nada, si hubiera querido lo hubiera hecho desde el primer mes, no cuando ya tenía cinco meses, pero bueno, ya lo hecho, hecho está y tendré que aguantarme acá y aguantarme el no ver a mis hijos también.
¿Qué significan para ti tus hijos?
Son lo más grande que tengo en la vida, yo daría la vida por mis hijos.
¿Cómo vas a celebrar el 10 de mayo?
Sin mis hijos, no significa nada el 10 de mayo. Ellos le preguntan a su abuela por mí y ella les dice que yo estoy trabajando, eso nada más les dice porque mi hijo está enfermo y no quiero que le pase algo.
¿Desearías que ellos te vieran aquí?
Sí me gustaría que vinieran pero me pongo a pensar a veces que no esta bien, van a querer que me vaya con ellos, yo no quiero que me vean llorando o que no sepa como decirles que no me puedo ir, tampoco quiero que esté enfermo. Esta bien que no me vean que piensen que estoy trabajado y que algún día voy a regresar con ellos.
¿Cómo vas a salir del penal?
A mi lo que diga la gente no me interesa, lo único que quiero es estar con mis hijos, lo demás no me interesa, no me interesa que digan “mira ahí va la asesina”, no me interesa, a mi lo único que me interesa es recoger a mis hijos, no me importa que hable la gente de mí.
La acusación
De acuerdo con lo documentado por los medios de comunicación días después de lo ocurrido en el Hospital de la Niñez, Librada Cruz Vásquez precisó que su situación y la de sus hijos había empeorado a últimas fechas, porque se le agotaba el dinero que le había enviado su concubino Miguel Ángel Rodríguez, quien se fue a Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida.
Según las versiones recogidas en los diarios, Librada ocultó su embarazo porque no era de su esposo y había sido abandonada por el joven con quien procreó a su cuarta hija.
La Procuraduría de Justicia, señaló que la causa de la muerte del producto fue "Asfixia por estrangulamiento". Según el Ministerio Público el producto tenía atado al cuello un fragmento de tela de color azul.
“Esto no es justo porque hay personas culpables y los dejan salir, otros son inocentes y aquí los tienen”
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